¿Me has visto cara de anchoa?

Ais, qué dura la vida treintañera. No nos dejan bajar la guardia, no podemos estar relajados disfrutando la vida porque llega alguien, que digo alguien, una jovenzuela pizpireta y te jode todo el buenrrolismo.

Llevo unos días ayudando en el negocio familiar. Pongo mi mejor sonrisa y me dejo explotar, que pa eso está este cuerpo saleroso. Muchos piropos me suelen caer, ya que las parroquianas siempre tienen una palabra amable, aunque sea sólo de postureo, y como buena hija de la dueña me dejo querer. Sin embargo, el otro día me bajaron de un hostión no sólo al suelo sino  al inframundo y mi indignación llegó a un límite nuevo para mí. 

Crisis de los 30, crisis de los 30 mujeres

Estoy acostumbrada a que ya me digan señora, no me importa, ni que me hablen de usted. De hecho, he superado el trauma sobre los vecinos que te comienzan a hablar, pero no me esperaba que a los treinta me soltaran semejante jarro de agua fría. 

Estábamos hablando de que hacía mucho tiempo que no me veían, que tengo largo el pelo, que blablabla, una abuela adorable me sonreía con calidez. Estaba a otra cosa cuando la pregunta sobre mi edad se lanzó al aire. Cuando dije treinta de manera natural, espontánea y relajada la nieta de tal adorable mujer, una muchacha de veinticuatro años me soltó: Te conservas muy bien.

 ¿Perdona? ¿Me has visto cara de anchoa?

No se quedó ahí la cosa. La niña quería terminar de arreglarlo diciendo que claro, que es cuestión de actitud, que hay que sentirse joven, que no sólo es la vestimenta sino que es el espíritu.... 

Sí mis queridos, casi me caigo de culo, casi me levanto y le suelto un sonoro bofetón. Sonreí, mucho y maliciosamente al saber que a todo cerdo le llega su San Martín y que en pocos años esta niña lo va a pasar muuuuu mal. (Una no se consuela porque no quiere)

Todo esto me sirvió para tomar una nota mental: Nunca, y he dicho NUNCA, te relajes cuando te pregunten la edad. Siempre hay alguien dispuesto a lanzarte una granada que estallará en tu cara.

Voy a apuntarme a fuego varias contestaciones a este tipo de comentarios, pero claro necesito ayuda.¿Vosotros que contestaríais? 




6 comentarios:

beamijita dijo...

Mira niña...tu si que te vas a conservar bien de la bofetá que te vi a da que te va a poner to el pellejo en su sitio...¿te parece bien Lorringa? ;) VIEJUNA!!

Salvatierra dijo...

Ay amiga! siento hacer más sangre en la herida pero yo estoy disfrutando ahora de las mieles que en otro tiempo fueron hieles. Me explico. Siempre he tenido una apariencia barbilampiña e infantil que provocó en su día comentarios del tipo "pareces un crio" y un manifiesto desgaste en mi carnet de identidad (de tanto sacarlo en la discoteca para demostrar que podía pasar y consumir alcohol). Pero ahora, como el Ave Felix (que es la prima segunda de Albacete del conocido Ave Fenix), resurjo de mis cenizas y me aprovecho de lo que a la postre ha pasado a ser una gran ventaja... Y es que en mis treintay aparento veintipocos, jejejeje!! Abrazos!

Patricia dijo...

YO creo que la respuesta correcta es : "Si? gracias, bueno debemos usar los mismos trucos, porque tú pareces de mi edad" -"No, yo tengo 24 aun" y tú rematas con un -Ah!vaya :( (Con cara de entre pena e incredulidad) Te aseguro que le dolerá más que cualquier hostión.

Revototal dijo...

Yo le diría "Pero qué te crees, niñata, que tu aparente vida perfecta de veinteañera va a durar toda la vida??!! a los 30 todo se va a la mierda, así que vete preparando porque no es nada fácil conservarse como yo!"

Unknown dijo...

No te preocupes, aún tienes posibilidades. Últimamente veo mucho gerontófilo por ahí.

Mustang Sally dijo...

A mi me echan treinta y pocos cuando voy sola, y me llaman señora cuando voy con los enanos, así que en mi caso la clave para parecer una veinteañera unos cuantos años más es: ¡¡No tengas hijos, que envejecen más que las canas!!! Ja,ja,ja

 

Síguenos en Instagram

Lloros, ruegos y regalos caros a...

adolestreinta [@] gmail [.] com


Sigue ADOLESTREINTA en Bloglovin


Más Adolestreintas que leer

About